Cuando la familia llega a África (precisamente a Tanzania), bailan los clásicos rituales, pero un hipopótamo comienza a perseguirlos. Para escaparse de él, suben a una balsa y se lanzan río abajo. Cuando están navegando, caen a través de una cascada, y aterrizan en una flor gigante; luego comienzan a caminar por la desierta sabana africana, sin esperanzas de salvación. Luego de andar por horas, llegan a un refugio para chimpancés, el cual era organizado por una científica, la doctora Jane Bushwell.
En el refugio, los chimpancés parecían vivir muy bien, pero, un día, unos cazadores furtivos llegan al lugar. Los Simpson tratan de ayudar a la científica a defender el refugio, pero Lisa descubre que los hombres no eran cazadores, sino activistas de Greenpeace, y que habían ido allí para salvar a los chimpancés del trabajo duro que les imponía en realidad la doctora Bushwell. Luego, entre todos descubren una mina dediamantes, en la que trabajaban los chimpancés. Lisa le recrimina a la doctora haber mentido, diciendo que allí trataba bien a los animales, cuando en realidad los hacía trabajar.
La doctora, en un acceso de desesperación, les ofrece diamantes a los Simpson y a los activistas a cambio de que no la denunciasen, y todos (excepto Lisa) aceptan. Finalmente, vuelven a Estados Unidos con los diamantes, y, en el avión, ven que su antiguo guía se había convertido en el presidente, y que el presidente era su azafato.